BATMAN, ARE YOU STAYING AT THE PARTY?

En una semana extraña, la primera de abstinencia de la temporada, nos queda la magnífica noche de jueves de la NBC con sus cuatro comedias de un tirón: Community, 30 Rock, The office y Parks and Recreation. Además, como mañana es 31 de octubre, la temática de Halloween no podía faltar. Mientras espero los subtítulos para ver a Michael Scott y Tina Fey, y busco un hueco para ponerme al día con Amy Poehler, he visto el capítulo de Community.

Introduction to Statistics es una muestra de lo que puede llegar a ofrecer esta serie, que desde su segundo capítulo había estado muy irregular. Mientras Jeff intenta ligarse a una profesora macizorra, Annie organiza una fiesta de Halloween mexicana en la que algunos de los personajes de la serie montan un lío monumental.

Lo mejor del capítulo:

- El disfraz de ardilla de Britta. ¡Adorable!

- Chevy Chase disfrazado de El señor de las bestias, drogado y alucinando.

- La parodia de Batman, a cargo de Abed, maravillosa:

Espero que Community pueda llegar a este nivel más a menudo.

ALGUNOS TRAILERS INTERESANTES

Me he pasado un buen rato mirando tráilers de películas y me he decidido a hacer una selección de algunos que me han llamado la atención.

1. A Serious Man. La nueva película (ya estrenada en USA) de los hermanos Coen. Poco más que añadir.

2. The Men Who Stare at Goats. Y ésta también podrían haberla firmado los hermanos Coen. La premisa del film es tan hilarante que sólo por eso ya la veré encantado. Humor absurdo a raudales con George Clooney y Jeff Bridges entre otros. Se estrena en USA el 6 novimebre, o sea ya.

3. Youth in Revolt. Interesante comedia de corte indie, con un Michael Cera interpretando una especie de Jekyll and Mr. Hyde contemporáneo y adolescente. Adaptación de una novela de los años 90. Se estrena en enero en USA.

4. The Fourth Kind. Creo que pocas veces un trailer me había dado tanto mal rollo. Da miedo hasta la distorsión en la cara de la chica para conservar su anonimato. Creo que puede estar bien la mezcla de "recreación" con "documental" (porque personalmente no me creo que se base en hechos reales y que utilice imágenes de archivo reales como quieren hacer creer). Como The Men Who Stare at Goats, también se estrenará el 6 de noviembre en USA.

5. Y para acabar dos teasers para abrir boca de dos estrenos prometedores del verano del 2010. Inception lo nuevo de Christopher Nolan que ha aparcado la saga de Batman, y The Last Airbender, lo nuevo de M. Night Shyamalan que adapta la primera temporada de una serie de animación: Avatar: The Last Airbender.

STATE OF PLAY: HOMENAJE AL THRILLER POLÍTICO Y AL PERIODISMO

En est post no voy a hablar de la película La sombra del poder (State of play, 2009), sino de la serie de la BBC del 2003 de título homónimo en la que está basada el film. Estructurada en seis capítulos de una hora, la serie dispone del triple de tiempo para desarrollar sus tramas y se hace patente en el resultado de ambas: la película es un interesante thriller político y la serie es un fascinante thriller político.

State of play es un relato de una enorme densidad, en el que no es nada complicado perderse. Como espectador uno nunca puede distraerse debido a la cantidad de información y al juego de mentiras y engaños entre los personajes. La serie enfrenta el mundo del periodismo al mundo del poder, formado por la política y las grandes corporaciones (petroleras en este caso), cuando el periodista Cal McCaffrey investiga sobre dos muertes sin conexión aparente que poco a poco acabarán desgranando una trama complicada y con muchos actores implicados.

El guión de Paul Abbott (creador de la reputada Shameless) es minucioso y no deja ningún detalle al azar. Todo encaja y toda trama y subtrama de la serie se cierra, y además el ritmo va creciendo a lo largo de los episodios sin decaer en ningún momento. Los giros de guión son naturales y verosímiles y no se abusa en absoluto de ellos, lo cual es de agradecer. Incluso el gran giro del último capítulo está justificado perfectamente y acaba de rematar la faena, elevando el nivel de la serie. Ésta combina en su resolución las dos explicaciones sencillas existentes: la más sencilla y la más conspirativa, redondeando toda la historia.

Precisamente por su vertiente de teoría de la conspiración, State of play entronca con los thrillers políticos* de la década de los setenta como por ejemplo las películas de Alan J. Pakula The Parallax View (1974) o All the president's men (1976), ambas protagonizadas por periodistas que investigan conspiraciones políticas. La realización de David Yates también remite a esos films con el uso recurrente de teleobjetivos, con la planificación, el grano de la imagen, el montaje, etc. por lo que, en cierta manera, podemos hablar de homenaje a este género, del que Sidney Lumet y John Frankenheimer también son claros referentes.

A la vez que homenaje al thriller político, la serie es también un homenaje al periodismo como un camino para encontrar la verdad al que no pueden acceder otros medios como la policía. La secuencia final de State of play es muy ilustrativa en este sentido. Cal observa cómo las rotativas imprimen los periódicos donde aparece la historia que ha conseguido desentrañar. Es la victoria del periodista a la vez que para él es una derrota por lo mucho que ha dejado en el camino al descubrir la verdad.

A la maravillosa y perfecta construcción del guión hay que añadir unas interpretaciones magníficas de todo el reparto sin excepción. Bill Nighy como editor del periódico construye un personaje cáustico y divertido que supera a la editora interpretada por Helen Mirren en la película. De la misma manera, tanto John Simm como David Morrissey, en sus papeles protagonistas de la serie, están por encima de Russell Crowe y Ben Affleck respectivamente. Igual que Kelly MacDonald (con su ininteligible pero adorable acento escocés), que tiene mucho más espacio para desarrollar a su personaje (la compañera de Cal en el periódico) del que dispone Rachel McAdams en el film.

Pocas veces he visto un thriller en televisión (o en cine) tan bien construida y desarrollada y que no sea esclava de sus giros argumentales. En State of play los acontecimientos suceden de una forma natural sin que ello signifique una pérdida de la intriga o del ritmo. Además combina a la perfección los elementos de la trama política con los elementos de las tramas personales.

En definitiva, una pequeña joya.

* Hay un documental interesante que retrata esta época que se llama Sydney Pollack y la generación del compromiso.

EL MEME DEFINITIVO

Bueno, por lo visto hoy no es suficiente para mí haber hecho el primer meme del blog, así que voy a por el segundo, por cortesía de Hablando de series. La verdad que es un meme muy, muy completo.

La peor serie nueva: No he visto todos los nuevos pilotos, y todas las nuevas que he empezado me están gustando. Tal vez pondría Flash Forward, pero tampoco sería muy justo.

La mejor serie nueva: Glee.

Qué series has abandonado esta temporada: Ninguna.

Qué serie crees que deberías haber abandonado ya: Ninguna, de momento contento con lo que veo.

Cual abandonaste y ahora piensas que deberías haber aguantado: No tengo añoranza de ninguna que haya dejado.

Qué series ves a ritmo USA: Bored to death, Curb your enthusiasm, 30 Rock, Dexter, How I met your Mother, Modern family, Flash forward, The office, Accidentally on purpose, Fringe, Family Guy, Glee, Community, The Cleveland Show, The good wife, The big bang theory, Two and a half men, Parks and recreation.

Otras series que veas actualmente: Battlestar Galactica, Damages, Extras, Seinfeld, Scrubs, Flight of the Conchords, The Tudors, Oz. (En todas ellas ya he superado la primera temporada y depende de las ganas veo una u otra cuando tengo un hueco)

Qué estreno (nuevo) esperas con más ganas: The Prisoner.

La que crees que deberías abandonar: Ninguna.

Cuál es esa serie de la que nadie habla pero que tú siempre intentas recomendar: Por ejemplo Coupling, que es una de las mejores comedias de la última década.

Qué serie esperas con más ganas cada semana: The Office, y antes solía esperar con muchas ganas How I met your mother, pero esta temporada ya no la espero con tantas ganas...

Tu cancelación más dolorosa: Arrested development. ¡Qué estrenen la peli ya!

Personaje femenino que te vuelve loc@ actualmente: Sue Alexander de Glee, que es delirante.

¿Y masculino?: Larry David, ¡vaya pájaro!

Ese actor o actriz que hace que veas una serie, aunque no te llame nada: Pues por un actor/actriz no vería una serie. Tiene que haber algo más que me llame la atención.

¿Eres de drama o de comedia?: Comedia.

¿Esa serie que tanto te cuesta defender?: Two and a half men, a mi gusto muy infravalorada.

Y esa otra que muchos defienden y tú no lo comprenderás: Pues yo soy de la opinión de que Lost está completamente sobrevalorada y no es, ni de lejos, una gran serie. Aunque es entretenida y la sigo.

La de: ¿Debería darle una segunda oportunidad?: Big love, vi el piloto, no me entusiasmó pero estoy seguro que es una muy buena serie.

Qué serie ves una y otra vez sin cansarte: Uf, de momento no me he sentado nunca a ver por segunda vez una serie. Pero sí que me gustaría hacerlo con Six feet under, The West Wing, The Wire o Freaks and Geeks, pero requiere de una inversión muy grande de tiempo, así que de momento no entra en mis planes.

MEME: LOS DIEZ MANDAMIENTOS SERIÉFILOS

Recojo el guante de En algún lugar de la tele y me estreno con el primer meme de mi blog. No ha sido nada fácil hacer la elección.

1.- Amarás a Larry David sobre todas las cosas.

2.- No tomarás el nombre de Jed Bartlet en vano.

3.- Santificarás la versión original.

4.- Honrarás a Jim Halpert y a Pam Beesly.

5.- No matarás a Benjamin Linus.

6.- No cometerás actos impuros con Claire Fisher.

7.- No robarás a Omar Little.

8.- No dirás falso testimonio ante Olivia Dunham ni mentirás.

9.- No consentirás pensamientos ni deseos impuros sobre Nancy Botwin.

10.- No codiciarás los bienes de Barney Stinson.

CHUCK LORRE Y LAS CONDICIONES DE LA EXISTENCIA

Chuck Lorre, el creador de dos de las comedias más exitosas del momento (Two and a half men y The big bang theory), tiene por costumbre incluir al final de sus episodios una especie de breve "editorial" o comentario sobre la vida, sus series o cualquier tema que se le pase por la cabeza. Él las llama Vanity Cards. Empezó haciéndolo en otra serie suya, Dharma & Greg (protagonizada por Jenna Elfman, que con Accidentally on purpose comparte los lunes con las dos series de Lorre en la CBS), y ya ha alcanzado las 263.

Para consultar la extensa lista de vanity cards no hace falta bajarse todos los capítulos de las series de Chuck Lorre y parar la imagen justo en el segundo escaso que se mantiene en pantalla. Para facilitar su lectura el guionista las cuelga en internet. Sin duda, las favoritas de un servidor son las que son censuradas por la CBS y que no son emitidas, pero que sí son colgadas en la web.

Como se puede observar, las vanity cards censuradas suelen versar sobre los problemas que tienen con la network y sus censores a la hora de aprobar o no sus guiones. Abundan estos roces, ya sea por una lista de palabras que la cadena no considera apropiadas, por que la CBS considera que una broma puede ser ofensiva para una comunidad o por una lúcida broma sobre el divorcio del presidente de Viacom.

Otra vanity card para el recuerdo es, por ejemplo, la que dedicó a los detractores de Two and a half men, que la acusan de ser moralmente dañina y que insisten una y otra vez en intentar cancelar la comedia. Lorre se muestra muy mordaz con la historia del oso y hace gala de su ingenio. Como ocurre en otra, dedicada a George Lucas y emitida tras un capítulo de The big bang theory en la que los personajes criticaban sus últimos trabajos, que resulta sencillamente hilarante.

Pero la mayoría de las vanity cards suelen exponer los pensamientos sobre la vida de Chuck Lorre, sus vivencias, siempre con un tono sarcástico. Y esta última semana ha incluido una en la página web que es una petición para el cambio inmediato de las condiciones de la existencia, en la que uno puede inscribirse para mostrar su desacuerdo con algunos de los aspectos de la vida, tales como el hambre, la enfermedad, la muerte, el ¡dolor emocional! o tener que levantarse a mear en mitad de la noche.

Las Vanity Cards son un excelente compendio del humor de este excelente creador de sitcoms que es Chuck Lorre.

LA ALARGADA SOMBRA DE MICHAEL SCOTT

Al fin me senté a ver la primera temporada de Parks and recreation, y en una tarde la he terminado (son tan sólo seis capítulos de 20 minutos). La serie es un clon de The Office, sólo que en lugar de transcurrir la acción en una empresa papelera transcurre en el departamento de parques de un pequeño ayuntamiento. Todo lo demás muy similar, y supongo que esa era la intención de Greg Daniels (adaptador de la versión inglesa de The Office) y Michael Schur, creadores de la serie.

Tanto Daniels como Schur, además de ser guionistas de The Office, comparten el haber escrito para Saturday Night Live (aunque en diferentes épocas) y han traido con ellos a la sensacional Amy Poehler para protagonizar Parks and recreation. La actriz es más conocida por haber interpretado a Hillary Clinton en los gags de SNL (junto a Tina Fey como Sarah Palin) y cumple a la perfección en su papel de Leslie Knope, empleada del ayuntamiento. El problema es el parecido con el personaje de Michael Scott.

Las semejanzas en la personalidad de uno y otro personajes son tantas que las comparaciones son evitables. O lo que es peor, al estar viendo a Amy Poehler no puedes evitar pensar en Steve Carell, y la actriz sale perdiendo en la comparación porque su interpretación resulta demasiado caricaturesca y no consigue darle la misma profundidad humana que tiene el jefe de Dunder Miflin en Scranton.

Más allá de las reminiscencias aThe Office, estilo documental incluido, la serie es muy divertida y consigue crear muy buenas situaciones cómicas. La galería de personajes también resulta muy graciosa, en especial el compañero hindú de Leslie, el jefe bigotudo o el músico de rock al que mantiene la guapa enfermera interpretada por Rashida Jones. Precisamente la presencia de esta actriz es uno de los mayores atractivos para mí, ya que recnozco que siento una especial debilidad por ella.

A pesar de que no considero Parks and recreation una serie que alcance el nivel de The Office, 30 Rock o Curb your enthusiasm, me he divertido mucho viéndola y tiene escenas impagables (Amy Poehler con un corte de pelo masculino, la canción que Andy dedica a su novia y que no tiene letra, los murales del ayuntamiento que escenifican la matanza de los indios por los pioneros que fundaron la ciudad...), por lo que la añado a la larga lista de comedias a seguir. Tras una primera temporada muy corta queda por ver cómo evolucionará.

PRODUCT PLACEMENT CANADIENSE

En el capítulo de anoche de How I Met Your Mother los guionistas introdujeron un product placement muy descarado. Se trata de la franquicia de cafeterías (al estilo Dunkin Donuts, ya que son conocidas por sus cafés y sus rosquillas) canadienses Tim Hortons. Aprovechando que el capítulo incide en el origen canadiense de Robin, ella y Barney visitan uno de estos establimientos en Toronto. Ya anteriormente se había hecho mención a la franquicia en el mismo capítulo, y como no hay dos sin tres, Barney reconoce que tal vez Canadá no está tan mal, porque el café estaba bueno.

Al parecer, Tim Hortons está ganando terreno en Estados Unidos, y que mejor forma de promocionarse que saliendo en una serie de éxito. A pesar de no ser una publicidad demasiado intrusiva, es algo que siempre me molesta bastante y nunca desaparece en mí el miedo a que poco a poco la publicidad vaya ganando más y más terreno.

Sobre el capítulo en sí, me parece que la serie sigue sin rumbo y en cierta manera suscribo lo escrito en este blog.

EL WOODY ALLEN MÁS RANCIO

El guión de Whatever works (Si la cosa funciona) debería haberse quedado en el cajón donde ha pasado los últimos treinta años. Parece que a Woody Allen se le empieza a secar el surtidor de ideas, y aún así no ceja en su empeño de estrenar una película cada año. Este ritmo de producción (que en su caso implica la escritura del guión y la dirección) es único en la industria cinematográfica en la actualidad y a bien seguro que tiene repercusión en sus films. En el caso de su última película, Allen recupera un guión que escribió en los años 70 con la excusa de haber encontrado al actor perfecto para interpretar esta comedia: Larry David.

El creador y protagonista de Curb your enthusiasm interpreta a Boris Yellnikoff, un viejo pesimista, hipocondríaco e insoportable que es una mezcla de los alter ego de Allen y David. Boris vive en Nueva York y conoce casualmente a una jovencita sureña ignorante (estereotipo redneck interpretada por Evan Rachel Wood) con la que se casa, incomprensiblemente. Posteriormente aterrizan en la ciudad de los rascacielos la madre y el padre de la chica, que sufren sendas transformaciones, de religiosos paletos a promiscua artista bohemia y decorador gay liberal respectivamente.

La endeblez de la historia de Whatever works deja todo el peso de la película en sus diálogos, que, como en toda su filmografía, están plagados de críticas más o menos sutiles a la religión, a la sociedad americana, al sistema... El discurso alleniano de siempre. La novedad radica en la poca mordacidad y la poca gracia del guión. Todo lo dicho es viejo y no hay nada que sea ni mínimamente provocador o hiriente.

Un hecho muy representativo del lugar que ocupa esta comedia es el inicio. Larry David mira a cámara y le cuenta directamente al espectador la historia, un espectador del que tan sólo Boris es consciente. Este recurso metalingüístico seguro que habría sido toda una sensación en los años 70, pero actualmente ya está muy visto (el narrador de The Big Lebowski tiene las mismas características, por ejemplo). Lo mismo sucede con el conjunto de la película. Uno tiene la sensación de que pertenece a otra época, que su estreno llega dos o tres décadas tarde.

En definitiva, una de las películas más prescindibles de Woody Allen que me deja para el recuerdo el maravilloso intento de suicidio de Boris Yellnikoff.

PEQUEÑO RECOPILATORIO DE KEVIN

Uno de los aspectos que convierte a The Office en una de las mejores comedias en la actualidad es su galería de personajes secundarios. Cada uno de los trabajadores de Dunder Mifflin tiene su pequeño rol en la serie y su personalidad está muy bien definida. En los dos últimos capítulos, uno de estos personajes ha tenido más protagonismo que los otros y ha protagonizado algunas de las escenas más cómicas de la temporada. Me refiero a Kevin Malone.

Sus peripecias de las últimas semanas me han llevado a echar la vista atrás y recordar algunos de los mejores momentos de este personaje tan especial. A continuación algunos de estos momentos.

ABED Y TROY (parte I)

Community es una serie bastante irregular hasta el momento, anárquica, que avanza a trompicones y no ha conseguido de momento trazar unos conflictos definidos. Aún así ofrece buenos momentos de humor, gracias a unos personajes muy estrafalarios. El resultado es que en el recuerdo me quedan un buen número de gags divertidísimos y para de contar, lo que ya de por sí no está nada mal.

De lo mejor de sus capítulos lo dejan para el final, con una escena independiente con Abed (el personaje que más destaca por el momento) y Troy. Aquí dejo estas escenas emitidas hasta ahora, que me parecen muy graciosas.

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LA ALEGRÍA DE GLEE

Esta semana he empezado a ver Glee, una de las nuevas series de la temporada, y ya me he puesto al día. No tenía unas expectativas demasiado elevadas, puesto que esperaba encontrarme algo del estilo High School Musical (no he visto ninguna de las películas, pero no me suelen gustar mucho los productos Disney), y me topé con una extraña mezcla que me entusiasmó. La serie es una combinación de la típica historia de adolescentes en un insituto con el musical y a la vez con un estilo de comedia muy gamberra. No me esperaba el tipo de humor que ofrece la serie y de ahí mi entusiasmo.

Me encantan todos los personajes de la serie. Desde los cándidos Will y Finn, engañados con los embarazos de sus parejas, hasta la mala malísima Sue Sylvester (uno de los personajes del año, sin duda), pasando por la obsesionada Rachel, la loca simpática de Emma, el acosador y coleccionista de muñecas Sandy, el desquiciado director del instituto, y así todos y cada uno de ellos.

Me encanta la sencillez de los conflictos, que quedaron tan bien definidos en el primer capítulo.

Me encantan los folletos de orientación para adolescentes.

Me encantan las perlas que dejan caer los personajes de vez en cuando. (Rachel: "Actualmente es peor ser desconocida que ser pobre")

Me encanta el tono surrealista de toda la serie.

Me encanta el uso que hacen de la primera persona. (La pelea en voz en off del séptimo capítulo o el diario de Sue Sylvester en el sexto son maravillosos)

Me encantan los números musicales. Tanto los más cercanos a Operación triunfo, encima del escenario, como los más representativos del género musical.

Me encanta Glee. Porqué me deja de muy buen rollo.

UN RELATO SOBRE LA (IN)JUSTICIA

Recientemente vi un documental de la HBO de 1996, titulado Paradise Lost. The Child Murders at Robin Hood Hills, que me estremeció. El film relata el juicio a tres menores, acusados de asesinar a otros tres niños de una manera salvaje. Se pone de manifiesto cómo, pese a la mala investigación policial y a la ausencia de pruebas y la abundancia de contradicciones, se condena a unos chicos por un crimen que lo más probable es que no cometieran. El pecado de los tres adolescentes (a los que se les llamó los West memphis 3) fue destacar en su comunidad por sus aficiones a la música de Metallica, por vestir de negro y por interesarse por la brujería.

Hay mucho escrito sobre este caso, ya que todavía ahora se sigue luchando para se reabra el caso y se tengan en cuenta nuevas pruebas. En la página de wikipedia se hace un buen resumen de la cronología de los hechos, desde el crimen a la actualidad, además de ofrecer enlaces y dar datos sobre el apoyo de famosos a los tres inculpados (como Winona Ryder, Tom Waits o Steve Earle). Es muy interesante echar un ojo a esta página para darse cuenta de cómo a veces falla el sistema.

Algo similar pasa con el documental. Durante sus dos horas y media te das cuenta de las "trampas" utilizadas durante el juicio: utilizar la confesión de uno de los tres, que dio bajo presión con el agravante de que es retrasado mental; utilizar rumores; utilizar el aspecto de los acusados; y así toda una retahíla de recursos a los que la fiscalía recurre para condenar a los tres adolescentes. A todo esto, añadámosle una mala investigación policial y unos familiares de las víctimas que claman por justicia y están convencidos de la culpabilidad de los acusados. Muchos de los elementos que aparecen en la película acostumbramos a verlos en series (como podría ser la magnífica Damages), pero esta sería una de esas ocasiones en que podemos afirmar que la realidad supera a la ficción.

Otro de los aspectos que muestra el documental es la mediatización de algunos casos, con un amplio despliegue de medios de comunicación, y cómo todo ello afecta al caso en cuestión. No es un tema baladí, ya que sin ir más lejos, en España hemos tenido casos parecidos como las niñas de Alcásser (cercano en el tiempo, exacto en el número de asesinatos y parecido en la brutalidad al de Robin Hood Hills) o el más reciente de Marta del Castillo. Como se refleja en el film de la HBO, los medios siempre suelen abordar todos estos temas desde la óptica del amarillismo.

Una de las historias que más llama la atención es la de John Mark Byers, el padre de una de las víctimas. Es terriblemente fascinante. Seguramente es el personaje más activo en contra de los acusados, llegando a aparecer en unas imágenes disparando a latas y diciendo que ojalá éstas fueran la cabeza de los tres de Memphis, y el documental se centra mucho en su figura, siguiéndolo y entrevistándolo en abundancia. El giro que da la situación cuando Byers le regala un cuchillo al cámara es un magnífico presente para los directores del documental. Byers da el salto de padre de víctima a sospechoso, debido a algunas coincidencias, y el relato gana en emoción.

Paradise Lost es una de estas películas que te dejan completamente hecho polvo tras el visionado. Observar como se destruyen unas vidas de manera totalmente injusta es muy doloroso. Sin duda este documental es un testimonio de los errores de un sistema que no es infalible, a la vez que es testimonio de la crueldad que es capaz de desarrollar el ser humano.

En 1999 los mismos directores, Joe Berlinger y Bruce Sinofsky, dirigieron Paradise Lost 2: Revelations y ahora se encuentran en fase de postproducción de Paradise Lost 3 (según imdb). A la espera de ver estas dos continuaciones dejo el trailer del primer documental a continuación.

IT WASN'T THE BEST NIGHT EVER

Los lunes por la noche es la noche de las comedias de la CBS, lo que convierte los martes en días de comedia para un servidor. Cuatro series de un tirón: la nueva Accidentally on purpose, la infravalorada Two and a half men, y dos de las mejores comedias en antena, The Big bang Theory y How I met your mother. Las dos últimas ya cumplen unas cuantas temporadas, la primera está en su tercera y la segunda en su quinta, y para mi las dos cojean de lo mismo en este momento: necesitan que pase algo, algo que tambalee el statu quo.

HIMYM carga con un peso muy gordo, que es la premisa de la serie, que no es más que Ted Mosby contándoles a sus hijos cómo conoció a su madre. El problema es que en el final de la última temporada jugaron demasiado con que el descubrimiento de quién era la madre estaba cerca y en el inicio de esta temporada han dado un paso atrás. Da la sensación de estar atascados en un punto incómodo, donde lo único que avanza es la trama de Robin y Barney, y los demás van dando vueltas sobre lo mismo: por un lado Ted y una cita por capítulo prácticamente, y Lilly y Marshall con sus rarezas entrañables.

Recuerdo como empezó la temporada anterior, con toda la historia de la boda de Ted y Stella con la inclusión de algún capítulo independiente pero memorable como el de la mejor hamburguesa de Nueva York. Y en lo que llevamos de quinta temporada no creo que estén al mismo nivel. Sigue siendo divertida y tiene muy buenos momentos, pero parece que ha empezado muy floja. Ni los momentos musicales del último capítulo, ni los montajes foto-musicales de Marshall (con web incluida, divertidísmo el vídeo: http://itwasthebestnightever.com/), ni tan siquiera ver a Barney en una relación con Robin me hacen disfrutar tanto cómo disfrutaba otros años. Pero me agarro a un clavo ardiendo, a los últimos segundos del episodio cuando Barney se exclama: "What I have done?". Y también confío en una entrevista a los creadores en la que decían que esta temporada se estaría más cerca que nucna de saber quién es la madre. Ojalá, porque la serie necesita que pase algo que haga avanzar la serie.

The Big Bang Theory, bajo mi punto de vista, se encuentra en una tesitura semejante aunque menos acuciante ya que nunca ha vivido de sus tramas. De hecho, la única incógnita que ha habido en la serie era qué pasaría entre Leonard y Penny, y ahora que están juntos la situación se encuentra en stand by. La gracia reside en sus personajes, y sobre todo en Sheldon. Ya hace bastante, desde la la segunda temporada, que pienso que exprimen demasiado el personaje que interpreta Jim Parsons y que es una equivocación hacer girar la comicidad en torno a él. Por eso siempre he agradecido algún capítulo en el que los otros frikis tienen más protagonismo, como el de la semana pasada con Raj y Howard yendo a un bar gótico, ya que me hace disfrutar más de las gracias de Sheldon.

En el capítulo de esta semana me he llevado una alegría momentánea que se ha desvanecido poco después. Por un momento pensé que introducían un personaje nuevo que podría dar mucho juego y que produciría un efecto refrescante a una serie que empieza a parecerme muy repetitiva. Cuando vi que a Raj le presentaban a una coordinadora de un proyecto en el que él tenía pensado colaborar vi una ventana abierta a todo un nuevo mundo, pero ésta se cerró de golpe. Y me parece una lástima ya que creo que algo de este estilo le daría mucha más vidilla a la serie.

Pese a ello, tanto The Big Bang Theory como How I met your mother siguen siendo dos de mis series preferidas, y siempre espero con ilusión que lleguen los martes para poder ver los nuevos episodios.

* Me encanta ver a Jason Segel en su faceta cómico-musical, como en la película Forgetting Sarah Marshall (Paso de ti en España), que recomiendo sin dudarlo, y de la que es, además de protagonsita, guionista. Como muestra un botón: http://www.youtube.com/watch?v=X5ZtwbzUFZE

LA CUARTA DE DEXTER

Ha empezado ya la cuarta temporada de Dexter y la serie empieza a mostrar síntomas de debilidad. Hasta el momento el balance que podríamos hacer sería: una primera temporada que sorprendió, una segunda que superó cualquier expectativa y una tercera que no pudo llegar al nivel de la segunda pero que mantuvo muy bien el tipo. Recordemos que las dos primeras siguen la obra de Jeff Lindsay y que la tercera y la que acaba de empezar ya no.

Cada una de las diferentes temporadas construye una trama alrededor de Dexter a un doble nivel: policial y personal. Empezó con el acoso de un asesino en serie que resultó ser su hermano, continuó con el descubrimiento de sus propios asesinatos y su búsqueda a la vez de una truculenta historia de relaciones sentimentales, y en la última temporada se centró en el descubrimiento de un posible compañero de crímenes a la vez que se afianzaba su relación con Rita y formaba una familia. Ahora la vida familiar, con bebé incluido, le pone al límite de sus capacidades para poder continuar con sus asesinatos a la vez que aparece un asesino en serio casi perfecto en la ciudad.

John Lithgow interpreta a Trinity, un asesino en serie que Frank Lundy (el agente del FBI que perseguía a Dexter en la segunda temporada) lleva muchos años intentando atrapar y que siempre se le escapa. Por lo visto hasta ahora, este personaje se encuentra en el punto opuesto a Dexter: dos asesinos en serie, uno es un lobo solitario (en palabras de Dexter) y el otro se ha convertido en un padre de familia. Y los dos muy buenos porque no les descubren.

En la trama personal de Dexter nos encontramos con varios conflictos: la rebeldía adolescente de Astor, el cansancio que provoca cuidar a un bebé y una serie de actos vandálicos en el barrio que por una consecución de eventos todo parece indicar que serán atribuidos a Dexter, lo que de buen seguro le producirá más de un dolor de cabeza. Todo ello contribuye a aumentar las dificultades para seguir llevando su doble vida, con los asesinatos justicieros por las noches.

Y decía que la serie empieza a decaer por una simple cuestión de comparación de tramas. Las de la cuarta temporada tienen muchísimo menos interés que las de las anteriores. Incluso en la tercera había unos asesinatos sin resolver que el espectador desconocía quién era el autor, cosa que en la temporada que llevamos no ocurre, salvo que la trama de los robos a turistas acaba ganando protagonismo, pero de momento parece algo muy secundario.

En la misma comisaría falta algo de chispa, de roce. Tan sólo una relación amorosa entre Laguerta y Batista, que me parece poco natural, y unos pequeños problemas de Dexter con Quinn, que me parecen poco convincentes, dan vida a la comisaría. Pero mantengo las esperanzas de que la serie pueda remontar el vuelo y confío en dos personajes: la periodista que se acuesta con Quinn y que le saca información a éste y el de John Lithgow, que estuvo inmenso en lo poco que salió en el primer capítulo y que creo que nos tiene muchas sorpresas guardadas.

Todo lo demás no me despierta mucho interés. Los asesinatos nocturnos de Dexter ya están muy vistos, de la misma manera que me empieza a sobrar la voz en off del protagonista que muchas veces no aporta nada. El retorno de Lundy que se mete en la relación de Debra con Anton tampoco no me entusiasma. Pero conservo la fe, porque Dexter es una gran serie y seguro que dentro de unos meses escribiré un post rectificando todo lo que he dicho hoy.

DE BODA EN THE OFFICE

Acabo de ver uno de los capítulos más esperados de la temporada: el de la boda de Jim y Pam en The Office. Episodio especial de 40 minutos para seguir las andanzas de los empleados de Dunder Mifflin en su viaje a las cataratas del Niágara para asisitir a las nupcias de la pareja. Y por si cabía alguna duda, esta serie me parece la mejor comedia en el aire actualmente y el capítulo de hoy no hace más que reafirmarme en mi opinión.

La boda es la culminación de un flirteo entre Jim y Pam que se alarga desde el primer episodio de la serie y que es un ejemplo de como llevar sobre el guión una relación a lo largo de seis temporadas, de manera que la evolución sea natural y no pierda nunca interés.

En el capítulo no falta el humor, basado como siempre en unos geniales personajes secundarios (Kevin está que se sale, y Andy no se queda atrás) y en un Michael Scott que sigue en su línea. Y tampoco falta el romanticismo en algunas escenas, lo que le añade un plus al episodio. El discurso de Jim la noche antes de la boda es de los que emociona y el final es bonito y hace justicia con una de las mejores parejas de la televisión.

Poco más que añadir, porque no quiero hacer ningún spoiler. Sólo remarcar que es un capítulo de los que se quedan en la memoria y a pesar de su duración se hace corto. ¿Qué tendrá esta serie que nunca me cansa?

*Excelente reseña del capítulo

DOS TENDENCIAS

Dos películas de la BBC estrenadas en la primavera pasada ilustran a la perfección dos tendencias existentes ahora mismo en el audiovisual británico. Por un lado Frequent asked questions about time travel es un ejemplo de la explotación del fenómeno geek o friki o nerd o como se le quiera llamar, y por otro Tormented supone la continuación del modelo de Skins, de gran éxito entre los adolescentes del Reino Unido.

Skins seguía las vivencias de un grupo de adolescentes ingleses y se convirtió en todo un fenómeno en Gran Bretaña gracias a un cóctel de elementos tales como: fiestas, drogas, música y sexo. Pero el gran valor de esta serie residía en su valentía al afrontar temas tabú de la adolescencia y su éxito al conectar con este público tan difícil. En Tormented la intención es dar continuidad a este modelo dentro del cine y del género de terror. Y el resultado es decepcionante.

La historia del estudiante gordo acosado por sus compañero que se suicida y vuelve convertido en un zombie vengador dirige la mirada hacia el bullying, pero a diferencia de Skins lo hace como mera excusa para caer en los clichés del género, tanto de personajes como de situaciones. A la película se le añaden algunos de los ingredientes de éxito en Skins como el sexo y las fiestas, y la participación de algunas actrices de la serie (April Pearson y Larissa Wilson), pero poco más.

Lo mejor del film es el descubrimiento de la belleza de Tuppence Middleton, la protagonista de la historia, que debuta en el cine. También son destacables algunos gags de personajes secundarios como los referentes a los emos, que aportan el toque de humor a la película, que en la segunda mitad carece de interés más allá de descubrir cómo el zombie de turno asesina a sus víctimas.

Eso sí, la presencia de personajes adultos escasea como en Skins, pero éstos en Tormented son tan poco creíbles como un director de escuela que obvia los asesinatos y minusvalora el bullying, un profesor de gimnasia que castiga al geek al que los deportistas estaban apalizando, una profesora de arte estrafalaria... y así todos ellos.

En fin, un producto mediocre de género del que esperaba más.

FAQ about time travel narra las peripecias de tres personajes (dos geeks y un escéptico) que viajan en el tiempo mientras deciden que es lo que quieren ser y hacer en la vida. Ya no es nada nuevo que los geeks sean los protagonistas de las historias (Judd Apatow y los suyos han aportado su grano de arena en esta evolución) que también van dirigidos a ellos mismos y esta película va en este sentido.

Tan sólo por la presencia de Chris O'Dowd, que interpreta a Roy en The IT crowd, y por las contadas referencias a obras de culto en el mundo geek, como Firefly, ya queda evidenciado a que público se dirige el film. Pero todo esto no es suficiente para hacer una buena película.

FAQ about time travel tiene un guión redondo donde todos los enigmas se van resolviendo y los viajes a distintas épocas de los protagonistas forman un rompecabezas que poco a poco va encajando todas sus piezas. Pero falla en la simpleza de las motivaciones de sus personajes, en sus historias. Y desaprovecha muchas situaciones que podrían dar mucho más juego y se quedan en nada.

Lo que podría haber sido una muy buena comedia termina siendo un agradable entretenimiento, con algunas risas y muchas sonrisas. Destaca tan sólo por su esfuerzo en ser una película sobre y para geeks (incluso Ray, el protagonista, le dice a Toby, el escéptico que no le llame geek, sinó imaginator, en un intento absurdo de dignificación), por todo lo demás resulta bastante prescindible.

THE DAMNED UNITED

Se estrenó hace unas semanas en España The Damned United, película basada en la novela de título homónimo de David Peace, que narra una etapa muy particular de la carrera de Brian Clough, uno de los mejores, y más peculiares, entrenadores del fútbol inglés del siglo pasado. En los años setenta se proclamó campeón de liga con un club modesto, el Derby County, y repitió con el Nottingham Forest, con el que además logró ser campeón de Europa dos temporadas consecutivas. El film se centra en los años que entrenó al Derby County, y su obsesión con Don Revie, entrenador del Leeds United (dominador del fútbol inglés en la época), hasta que fichó como manager del Leeds sustituyendo a Revie. Una etapa que terminó con fracaso.

El proyecto empezó en manos de Stephen Frears, que encargó el guión a Peter Morgan (guionista de The Queen y Frost/Nixon), aunque al final sería Tom Hooper quién dirigiría la película, producida por la BBC. El elegido para interpretar a Brian Clough fue Michael Sheen, que más allá de su parecido con el entrenador realiza un trabajo soberbio. No era la primera vez que se ponía en la piel de un personaje real, ya que interpretó a Tony Blair en The Queen y a David Frost en Frost/Nixon.

Sheen está muy bien acompañado, como siempre en el cine británico, por unos secundarios muy solventes que redondean un trabajo de ambientación en la época excelente. La recreación realista de esos años te mete de lleno en la película, en la historia de Clough y su obsesión y lucha por unos ideales dentro del fútbol: buen juego por encima del juego duro y cercano a las trampas del Leeds de Don Revie.

La película es una mirada a una época del fútbol muy distinta a la actual. Choca ver los campos embarrados, los ceniceros en los vestuarios o los jugadores fumando. Todo ello es reforzado por la intercalación de imágenes documentales sobre partidos, declaraciones, etc. que ahondan en la voluntad de hacer un retrato de un momento determinado. Incluso se recrean imágenes que se emitieron entonces en televisión (también suecde en Control, la película sobre la vida de Ian Curtis) como la entrevista a Clough la misma noche en que lo echan del Leeds.

Viendo The Damned United me vino a la memoria el libro Fiebre en las gradas de Nick Hornby, donde describía su afición al fútbol y al Arsenal desde niño y en el que se apreciaba el cambio que ha sufrido el mundo del fútbol, y su manera de vivirlo por parte de los aficionados, desde los años setenta a los noventa. Y el film retrata esa época anterior a las retransmisiones por televisión, a la tragedia de Heysel, a los asientos en las gradas. Y a la vez reconcilia el deporte rey con el cine, ya que no recuerdo haber visto una película de esta calidad tratar seriamente este tema, demostrando que es compatible contar una buena historia sobre el fútbol.