¡Bendito el día en que Superjail! cayó en mis manos! Esta macabra y psicodélica serie de animación entra de lleno en el pabellón de las especiales, junto a dos burradas de dibujos que se han estrenado esta temporada (Archer y Ugly Americans) o a dos locuras "infantiles" (Phineas y Ferb y Bob Esponja).
Por desgracia, la brevedad es una de las carcaterísticas de Superjail!. Emitida en otoño del 2008 (previo pase de un capítulo piloto en mayo del 2007), la serie tan sólo cuenta con once entregas de apenas diez minutos de duración cada una. Es ideal para devorar en un par de tardes o en un fin de semana, y además, el barroquismo de sus escenas invita a verla más de una vez porque seguro que se aprecian muchos más detalles en el segundo visionado. Sus intros son un claro ejemplo, diferentes en cada capítulo y que mantienen al espectador atento a las situaciones que enseñan. (Aquí una recopilación)
Por encima de la brevedad, Superjail! juega con dos bazas: el gore y la psicodelia. Los autores no tienen recato en enseñar vísceras y sangre hasta la saciedad mostrándonos mil y una maneras de morir. Todo esto como acompañamiento a una historia y unos personajes surrealistas: una cárcel apartada del mundo, gobernada por una especie de Willy Wonka sádico; un contable pequeño, puteado y estresado; una guardia muy poco femenina; un robot volador y dos gemelos gamberros. Sus aventuras son de lo más variopintas, ya que van desde el descubrimiento de unas ruinas subterráneas de una civilización primitiva hasta la creación de una máquina de sueños, pasando por la visita de una niña enferma de cáncer (menudo especial de Navidad...) o la orden de vestir a los presos de conejitos.
Para terminar, un vídeo y un consejo: para que te guste esta serie tiene que gustarte este tipo de humor, ya que sinó lo que puede producirte es cierta repugnancia.
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